
Dante Castelo representará a Villa Constitución en la instancia nacional de las Olimpiadas Matemáticas
Con solo 11 años, el alumno de la Escuela Dante Alighieri clasificó al certamen nacional que se realizará del 21 al 24 de octubre en La Falda, Córdoba, acompañado por su familia y docentes.
Dante Castelo, estudiante de quinto grado de la Escuela Dante Alighieri, representará a Villa Constitución en la instancia nacional de las Olimpiadas Matemáticas Argentinas que se desarrolla del 21 al 24 de octubre en La Falda, provincia de Córdoba. Con entusiasmo, humildad y una sonrisa contagiosa, el pequeño comparte una historia que combina esfuerzo, curiosidad y acompañamiento familiar y escolar.
“Empecé en abril con los certámenes, me gusta mucho la matemática, es mi materia favorita”, contó Dante en diálogo con la periodista y locutora nacional Luna Vilar Guidi, durante el segmento La otra cara de la Luna del programa Cámara Abierta, streaming de Sur Multimedios. A su lado, la vicedirectora Mariela Passarelli destacó el compromiso del alumno y el trabajo sostenido de la institución para impulsar la participación en este tipo de competencias.
Del aula al desafío nacional
La Escuela Dante Alighieri promueve desde hace años la formación y acompañamiento de sus alumnos en las Olimpiadas Matemáticas. Este proceso comenzó con un certamen interno en abril, continuó con las instancias regionales en la Escuela Palmar y en Rosario, y culmina ahora con la clasificación de Dante a la etapa nacional.
“Son ejercicios que invitan a pensar, a aplicar estrategias y lógica. No se evalúa solo el resultado, sino el procedimiento”, explicó Passarelli, remarcando la importancia educativa de estas experiencias.
Entre números, nervios y sueños
Dante reconoce que los nervios estuvieron presentes en cada etapa, pero también la preparación constante junto a su familia. “Estudiaba con mi papá y mi mamá. También me ayudó una profesora que se llama Gaby”, relató. A su corta edad demuestra una madurez admirable: “Me tengo fe, pero si no pasa, no pasa nada, porque ya llegué a un lugar al que casi nadie llega”.
Durante la entrevista, el joven estudiante recordó a sus compañeros —“les mando saludos a todos mis amigos del aula”— y compartió su entusiasmo por la experiencia que lo espera. “Estoy feliz por haber llegado hasta acá. Es una oportunidad única”, expresó con una mezcla de orgullo y serenidad.
Acompañamiento institucional y familiar
Desde la escuela destacaron el compromiso de la comunidad educativa y de la Asociación Dante Alighieri, que colabora con los costos de inscripción, viáticos y alojamiento. “Para nosotros es una enorme satisfacción que un alumno vuelva a representar a la institución a nivel nacional. Es una experiencia enriquecedora y un orgullo colectivo”, afirmó la vicedirectora.
Mientras tanto, Dante continúa con sus tareas escolares y participa de los talleres del proyecto institucional “Identidad”, que vincula arte, raíces y familia. “Ayer pintamos macetas con nuestros papás, fue muy divertido”, contó con entusiasmo.
El valor de animarse
Antes de cerrar la entrevista, Dante dejó un mensaje inspirador para otros chicos:
“Yo no quería ir a las Olimpiadas, no sé por qué… pero lo que me hubiese perdido si no iba. Es una experiencia muy buena. Si pasás, genial. Y si no, también.”
Palabras que reflejan el espíritu del aprendizaje: animarse, disfrutar y valorar el camino